Las políticas y directrices europeas (y por extensión nacionales) sobre datos presentan retos y oportunidades. De forma amplia los datos abiertos (open data) o, de forma más específica, la gestión de datos de investigación (research data management) son dos ámbitos en los que los profesionales de la información tienen un rol que desempeñar, pero, ¿estamos los documentalistas preparados (y dispuestos) a ocupar nuestro papel en el mundo de los datos?¿“las universidades” adaptan con agilidad las competencias acordes a las nuevas demandas profesionales?
¿Es un grupo de personas restringido capaz de localizar, filtrar y dar respuesta a todas las necesidades de información dentro de una organización? Tradicionalmente los departamentos de vigilancia o de inteligencia se ocupaban de suministrar información para toda la organización pero, en la actualidad, las organizaciones, buscando la diferenciación, se sitúan cada vez más en los umbrales de su propio ámbito de conocimiento, y conceptos como hibridación o interdisciplinariedad hacen más complicado dar respuesta a las necesidades de información desde un único departamento.