Hace solo unos días que ha salido a la luz Inteligencia Artificial: retos y oportunidades para la formación y el empleo en el ámbito de la Comunicación (2025), publicado por Comunicación Social Ediciones y Publicaciones. El libro, editado por Jordi Sánchez-Navarro (director de los Estudios de Ciencias de la Información y de la Comunicación de la UOC) y Pedro A. Hellín Ortuño (profesor titular del Área de Comunicación Audiovisual y Publicidad en la Universidad de Murcia), analiza la irrupción de la inteligencia artificial en el ámbito de la comunicación, en un sentido amplio.
Esta segunda parte del artículo publicado unos meses atrás es un ejercicio enfocado a proyectar el futuro de la cultura digital y a plasmar ideas que circulan en los debates contemporáneos ligados a nuestra forma de vida en la era de los entornos digitales. Hemos formulado cien preguntas para reflexionar en comunidad. Estas preguntas no tienen respuestas claras y definitivas; también son disparadores de conversaciones más amplias, y esa es la intención final.
En tiempos de oscuridad y desesperanza, el periodismo tiene la obligación no solo de informar, sino de ser un faro que ayude a comprender una realidad cada vez más compleja e infoxicada.
En el área de prácticas de los Estudios de Ciencias de la Información y de la Comunicación (ECIC) de la UOC hemos estrenado una pequeña colección de pódcasts que lleva por título «Jóvenes comunicadoras: con voz propia». La colección da voz a cinco jóvenes profesionales con trayectoria o cargo de responsabilidad dentro del ámbito del periodismo, la comunicación corporativa, la publicidad o los social media.
En plena era digital, la desinformación se ha convertido en uno de los grandes retos de nuestro tiempo. Las noticias falsas se propagan a una velocidad alarmante, afectan la percepción de la realidad y generan impactos sociales y políticos significativos. Este fenómeno erosiona la cohesión social y pone en peligro la integridad informativa, ambos elementos esenciales para el buen funcionamiento de la democracia. Según el Foro Económico Mundial, la desinformación es una de las principales amenazas globales a corto plazo.
«¿Están tocadas de muerte las redes sociales?». Con esta provocativa, a la par que sugerente pregunta, la periodista e investigadora Susana Pérez Soler me invitó a unirme a un debate asíncrono impulsado por la revista Barcelona Metròpolis y centrado en el rol que actualmente ejercen estas populares plataformas digitales en nuestra sociedad. Bien arropado por ocho especialistas del ámbito a quienes sigo y admiro desde hace tiempo, acepté el reto.
El año 2024 volvió a poner en el foco de atención el debate en torno a la responsabilidad en los social media. Y es que –aunque las redes sociales nos ofrecen muchas posibilidades y opciones de comunicación– la apertura de la participación pública, el gran alcance que pueden obtener los mensajes y la facilidad de consumo de los formatos que circulan en estas plataformas nos sitúan ante nuevos riesgos. Todo un reto con muchísimas derivadas.
La agenda mediática, que históricamente ha seleccionado los temas que son importantes para la audiencia, se ha visto desplazada en gran medida por las redes sociales. Las noticias de guerras y catástrofes naturales quedan ocultas y pierden actualidad rápidamente, a pesar de su continuidad y vigencia informativa. Desgranamos algunos de los factores que hacen que esto ocurra, como, por ejemplo, la fatiga informativa, la necesidad constante de nuevas historias y la carencia de confianza en los medios. Para concluir, proponemos cinco rutinas para velar por un periodismo de calidad.
Como cada año, del 24 al 31 de octubre del 2024 se celebró la Semana Mundial de la Alfabetización Mediática e Informacional de la UNESCO. Este importante acontecimiento internacional se celebra con el propósito que instituciones y organizaciones de todo el mundo compartan ideas y exploren formas innovadoras de promover la alfabetización mediática e informacional de la ciudadanía. Este año, el tema que ha centrado las numerosas celebraciones relacionadas con esta semana ha sido el impacto transformador de las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación en la producción y difusión de información.
El estreno de una película honesta y llena de vigor como El 47 (Marcel Barrena, 2024), producida por Mediapro Studios, ha disparado muchas discusiones sobre la lengua y la inmigración en Cataluña, pero no tantos debates sobre las luchas vecinales que se sucedieron durante años en diferentes barrios de Barcelona, cómo es el caso de Torré Baró en el caso del film. Un autobús y un trayecto inimaginable hasta la cima de un cerro se convierten en el McGuffin para coser emocionalmente el vínculo roto entre ciudad y periferias.