Termina un semestre más. Y posiblemente hoy el cuerpo me pide escribir algo diferente de lo habitual, de un artículo de opinión que habla de cosas que pasan fuera, y lo quieres hacer de cosas que pasan dentro de tu entorno docente. Como profesor, cierras carpetas mentales, de asignaturas, de mensajes con consultores, casi como si fueran el final de unas colonias. Más que una carrera, a veces puede parecer una persecución.
El buen comer está de moda, está en los medios y está, sobre todo, en la red. Festivales gastronómicos, restaurantes pop-up, blogs y apps nos ayudan a elegir un buen vino o a descubrir el tiempo exacto de preparación del fricandó... Lo que se cuece va más allá de los fogones y, ya sea por la crisis o por estar a la última, el hecho es que la cocina gana cada vez más 'seguidores', se expande en Internet y se multiplica en las redes sociales. Bienvenidos al mundo foodie, donde comer y cocinar son, más que nunca, comunicar.
En el hogar de la Sra. Rushmore celebran lo que son, la agencia en la que la mayoría de los publicitarios querrían trabajar. Quizás porque su Atleti les ha hecho más fuertes, más de cien profesionales se vienen arriba cada día y consiguen emocionarnos con su publicidad. Clemente Manzano, su director general, nos abre las puertas de una agencia humana con un toque muy especial.
El anuncio de las nominaciones a los premios de la Academia de Hollywood —conocidos como Óscar— a las películas de animación ha producido a quien firma estas líneas la grata sorpresa de ver entre los títulos seleccionados a Song of the Sea, la película que ganó la última edición de AnimaFICX, la sección del festival de Gijón en la cual tuve el honor de ser jurado. Con el permiso de los lectores de COMeIN, aprovecho la noticia de las nominaciones para poner negro sobre blanco algunas reflexiones sobre el panorama internacional de la animación —dejando el panorama doméstico para un futuro artículo—.
Hace 25 años que trabajo en el ámbito de la información y la comunicación. Primero como periodista y más tarde como relaciones públicas, pero siempre con un pie ‒y en ocasiones los dos‒ en el mundo de la docencia universitaria. Con este bagaje, hoy os invito a visualizar el pasado sin un ápice de nostalgia: sólo para celebrar el futuro (y el aniversario #UOC15infocom).
Del 15 al 19 de septiembre del 2014 se celebró exitosamente la “Measurement Week”, una acción global liderada de manera local por cada uno de los miembros de AMEC (International Association for Measurement and Evaluation of Communication) en sus países de origen, con el fin de compartir conocimiento en materia de medición y big data. La “Measurement Week” seguía el impulso de AMEC Submit 2014, celebrado en Amsterdam los días 11 y 12 de junio, un evento de máximo nivel que se adentró en las tendencias en métricas de intangibles. En este artículo se describen algunas de las ideas principales que surgieron en el marco de estos eventos, incluyendo el punto de vista de uno de los participantes destacados, Jesús Bélmez (Insight Manager de ACCESO).
El pasado 11 y 12 de junio se celebró en Amsterdam AMEC Submit 2014, un acontecimiento de máximo nivel centrado en la medición y evaluación de la comunicación, que se adentró en las tendencias en métricas de intangibles. En este artículo se describen algunas de las ideas principales que surgieron en el marco de este acontecimiento.
Las políticas y directrices europeas (y por extensión nacionales) sobre datos presentan retos y oportunidades. De forma amplia los datos abiertos (open data) o, de forma más específica, la gestión de datos de investigación (research data management) son dos ámbitos en los que los profesionales de la información tienen un rol que desempeñar, pero, ¿estamos los documentalistas preparados (y dispuestos) a ocupar nuestro papel en el mundo de los datos?¿“las universidades” adaptan con agilidad las competencias acordes a las nuevas demandas profesionales?
En estas últimas semanas han sido diversos los anuncios relativos a la revitalización de franquicias clave de la cultura popular contemporánea. Así, Crepúsculo, Harry Potter, Breaking Bad, Star Wars, Twin Peaks e incluso Mad Max han sido objeto de noticias o adelantos sobre su inminente futuro, para deleite de sus seguidores. En los casos de más larga trayetoria, algunos de sus fans se han dedicado desde hace tiempo a la creación de sus propias historias y en la actualidad se llega incluso hablar de la batalla por el control de los “universos expandidos”. Y yo no puedo dejar de hacerme una pregunta: ¿de verdad queremos “saberlo todo”?
En estas últimas semanas han sido diversos los anuncios relativos a la revitalización de franquicias clave de la cultura popular contemporánea. Así, Crepúsculo, Harry Potter, Breaking Bad, Star Wars, Twin Peaks e incluso Mad Max han sido objeto de noticias o adelantos sobre su inminente futuro, para deleite de sus seguidores. En los casos de más larga trayetoria, algunos de sus fans se han dedicado desde hace tiempo a la creación de sus propias historias y en la actualidad se llega incluso hablar de la batalla por el control de los “universos expandidos”. Y yo no puedo dejar de hacerme una pregunta: ¿de verdad queremos “saberlo todo”?