En un artículo anterior, indagaba sobre el sentido de la educación a partir de las aportaciones de dos referentes de filosofía clásica: Jean-Jaques Rousseau e Immanuel Kant. Propongo ahora profundizar en este debate recuperando a otros dos autores fundamentales: Karl Marx y Paulo Freire. Sus aportaciones han tenido una gran relevancia en la construcción de una visión crítica de la educación. No solo en la medida en que nos han ayudado a comprender los mecanismos internos de los sistemas educativos para la reproducción de las desigualdades, sino también porque han señalado y defendido que la educación es –o debería ser– un instrumento poderoso para la transformación social.
En 2019 se publicó el libro Urbanismo feminista. Por una transformación radical de los espacios de vida, del Col·lectiu Punt 6. Se editó en Virus Editorial. A menudo es importante detenerse a entender el perfil de las diversas editoriales, y, en este caso, hay una conexión directa de la temática del libro con la idea política de la editorial en cuestión, que concibe «el libro como una herramienta de una comunidad de lucha y en lucha, que no tiene sentido si no es para pensar la realidad de manera radicalmente crítica».
Tras el paréntesis de la pandemia, recuperamos la Jornada Almanzora Comparte. Bajo el reto de «Cómo mejorar la actividad económica de la comarca», volvemos a utilizar la dinámica de la hackathon para actuar como catalizadores del intercambio de experiencias. El espíritu de esta jornada es el de la puesta en común de aprendizajes compartidos por los representantes de empresas, instituciones y asociaciones de diversos ámbitos e intereses.
Podría decir que el orden de los nombres es fortuito, pero no lo es y, aunque la Wikipedia me informa de que hay una divergencia en el título entre el Estado español y Sudamérica (en el primero era El bueno, el feo y el malo, mientras que en el segundo era El bueno, el malo y el feo), es evidente que no soy equidistante entre los tres personajes y que el orden tiene sentido y de momento, todavía, Trump es el malo y Elon Musk es el feo, no por temas estéticos sino porque le ha tocado.
La televisión ha sido el medio por excelencia durante muchos años y está cambiando radicalmente en términos de consumo. Estamos viviendo un momento histórico en cuanto a la digitalización de los procesos de cualquier medio. El modelo de suscripción ha llegado para quedarse y para dar más importancia al contenido. Decidimos pagar por servicios bajo demanda para escoger una película, serie o documental, noticia o contenido afín a nuestros gustos e intereses, cosa que hace tres o cuatro años era impensable en España.
La transversalización de género no es un reto fácil. Ni en los órganos de poder o gobernanza, ni en la elaboración de políticas públicas y sus aplicaciones prácticas. Pues, sin presupuestos, diseños y aplicación de tácticas específicas, pensadas desde lo comunitario, transversalizar el género es susceptible de ser reducido a una idea o, peor, a un ideal. Evidentemente, dentro del ámbito y de la institución universitaria, el reto existe y es mayúsculo.
Hace un par de años estuve paseando por la playa de un municipio al que afectó un temporal de los que son habituales cada año en nuestro territorio. La playa, pese a haber repuesto parte de su arena, tenía un aspecto desolador. En las siguientes líneas os cuento un proceso de reflexión creativa, a partir de un ejercicio de ilustración.
Periodismo deportivo, político, económico, cultural, científico… Estas son algunas de las especialidades posibles a la hora de decidir en qué ámbito quieres profundizar y formarte, para poder trabajar en una publicación especializada. Para hacerlo, hace falta un buen conocimiento del ámbito escogido, disponer y seleccionar buenas fuentes de información y, también, hablar el mismo lenguaje entre científicos (o políticos, o deportistas, etc.) y periodistas.
Dos años después del confinamiento para frenar la COVID-19, vuelven los grandes eventos, para alegría de un sector que se ha visto forzado en los últimos tiempos a adaptarse a un contexto muy complejo, que en un primer momento lo abocó a una paralización total. El espectáculo de la final de la Super Bowl y la gala de los Óscar nos han mostrado que vuelven los grandes espectáculos presenciales retransmitidos en directo a nivel mundial.
Si la muerte de José Pérez Ocaña, Ocaña, interrumpía el retrato más radical de la Transición española en 1983, casi cuarenta años después los adioses de Miguel Gallardo y de Pau Riba sellan una etapa en Barcelona y en el Estado español narrada por el underground cultural. Se resisten al epitafio definitivo unas pocas figuras como Nazario Luque Vera, Nazario.