En el sector de la publicidad y otros ámbitos de la comunicación persuasiva, a medida que el uso de la inteligencia artificial (IA) se convierta de forma vertiginosa en un mero commodity, las agencias deberán dotarse de elementos diferenciadores que aporten verdadero valor a sus clientes y, en definitiva, a las marcas en este terreno. El lanzamiento de Mmusa, la herramienta de IA promovida por la agencia de branding Summa, apunta en esa dirección.
La capital andaluza acogió la última semana de junio el XV Congreso Español de Sociología, organizado por la Federación Española de Sociología en colaboración con el Departamento de Sociología de la Universidad Pablo de Olavide. Esta nueva edición ha estado dedicada al estudio de la sociedad digital.
Hace veinte años, estudiar diseño implicaba un periplo que conllevaba trasladarse a Barcelona o a Madrid, centros neurálgicos de la profesión. Aparte de las escuelas de diseño, allí encontrabas las bibliotecas especializadas, los quioscos donde podías comprar revistas que venían directas de Londres y los EE. UU., las exposiciones y acontecimientos donde se encontraba el bullicio del sector creativo. «Todo esto eran campos» y las cosas han cambiado. ¿Se puede diseñar lejos de la capital?
La comarca del Almanzora debe su nombre al río que la atraviesa a lo largo del valle. Prácticamente en paralelo, discurre también la antigua vía del ferrocarril que unía Lorca con Granada; el granaíno lo llamaban. Lamentablemente, ya no circula ningún tren por esos raíles desde hace casi 40 años. Pero el legado de aquella época próspera va más allá de los restos de hierro y madera de los caminos: los edificios de viajeros, los andenes, muelles de carga, depósitos de agua, casetas de guardagujas y de guardavías, cocherones, etc.
Roger Silverstone, en su libro ¿Por qué estudiar los medios?, sostiene que nuestra dependencia de los medios se ha consolidado y, actualmente, nos proveen no solo entretenimiento, información y comodidad, sino que también contribuyen a nuestra sensación de seguridad y nos ayudan a dar sentido a nuestras experiencias cotidianas. En este sentido, Silverstone sugiere, así, abordar el estudio de los medios también desde lo social, cultural, político y económico.
La Sociedad Catalana de Comunicación del Institut d’Estudis Catalans (SCC-IEC) «ya hace veinte años que tiene veinte años», como dirían Joan Manuel Serrat o más recientemente los Buhos en «Milers d’espurnes». Con este popular eufemismo, evitamos emplear adjetivos como cuadragenaria o cuarentona, puesto que la entidad que mejor representa la investigación en Ciencias de la Comunicación en catalán se encuentra en un estado de salud envidiable y con más empuje que nunca.
La inteligencia artificial ha dejado de ser una tecnología o una problemática de nuestros tiempos, es ya una tautología que anula cualquier forma de reflexión crítica sobre la condición cíborg del humano actual. Es un ejemplo el protagonismo absoluto que ha tenido en la decimoctava edición del Mobile World Congress (MWC, 2024), celebrado en Barcelona este pasado febrero. El comportamiento del hombre tecnológico es un síntoma de que quien determina hoy nuestra identidad son las empresas tecnológicas y su extractivismo computacional (Gozalo Salellas, 2023; Sadin, 2020).
El humor hecho por mujeres que se gesta en el ecosistema mediático de internet tiene un encaje difícil cuando se desplaza a canales y formatos generalistas. Después de Elvis (Baz Luhrmann, 2022), donde se nos contó con una narrativa y una estética apabullantes el ascenso y caída del mito popular de Elvis consumido en las fauces del showbusiness, Sofia Coppola nos cuenta en Priscilla (2023) el reverso íntimo y doméstico de la vida de su mujer durante sus años de relación (1959-1973): su primer encuentro en la base militar norteamericana de Alemania –ella con 14 años y él con 24–, su marcha a EE. UU., su vida en Graceland, la boda, la maternidad y la separación.
Se acerca el 8M (Día Internacional de la Mujer) y parece que es inevitable cuestionar o cuanto menos revisar la necesidad de volver a celebrar este día tan reivindicativo. Para algunos y algunas, pero sobre todo para aquellos varones que se ven amenazados por el feminismo, carece de sentido, puesto que –según ellos– tenemos ya todos los derechos adquiridos e incluso en detrimento de los suyos propios.
El pasado 10 de febrero asistí como miembro de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas a la 38.ª Gala de los Premios Goya que tuvo lugar en la Feria de Valladolid. A las puertas del recinto, las protestas de los agricultores se hacían sentir en forma de gritos y algún que otro insulto dirigido a las personas asistentes a la ceremonia.