Las instituciones del ámbito local son las que tienen un contacto más directo con la ciudadanía y las que desarrollan una gran y variada actividad en lo que a protocolo y actos se refiere. Se trata de eventos que recogen las costumbres y peculiaridades del territorio y que, en muchos casos, combinan tradición y modernidad. De ahí la importancia de que cada entidad cuente con un protocolo propio que sistematice estos eventos y que recoja sus singularidades.
El ámbito (ceremonial) y la normativa (protocolo) conforman la malla, el entramado, sobre el que armar los actos. Proporcionan a los profesionales una sistemática general –a partir de la cual pueden realizar un planteamiento teórico previo a la celebración de los eventos– por la que han de regirse estratégicamente las personas y entidades que conforman en cada ocasión los públicos organizacionales.
Bajo el nombre clave de «Operación Puente de Londres» se trabajó todo el conjunto de acciones operativas que realizar en el momento de la muerte de la reina Isabel II, la Queen del Reino Unido durante siete décadas. Dentro del conjunto de actos y eventos preparados, la organización de la histórica cola para la capilla ardiente de la reina ha sido tan destacada que ha conseguido tener nombre propio: la Queue (la Cola, en mayúsculas).
Tal y como vimos en la primera entrega de este artículo, el funeral de la Reina Isabel II del Reino Unido reunió a más de 500 mandatarios de todo el mundo, 2.000 invitados dentro de la abadía de Westminster y una audiencia de millones de personas que siguieron la retransmisión en directo. El acto, que duró menos de una hora, fue un ejemplo de ceremonial, etiqueta y protocolo. En esta última entrega, analizamos los símbolos, la parte musical, la etiqueta y la ornamentación floral.
El funeral de la reina Isabel II de Inglaterra reunió a más de 500 mandatarios de todo el mundo y 2.000 invitados dentro de la abadía de Westminster, y tuvo una audiencia de millones de personas que siguieron la retransmisión en directo. El acto, que duró menos de una hora, fue un ejemplo de ceremonial, etiqueta y protocolo. En esta primera entrega del artículo, analizamos el carácter del funeral de Estado, su meticulosa planificación, su espacio, sus invitados y el programa.
La Fundación Josep Irla acaba de publicar el libro Dalmau Costa. Mestre de cerimònies de dues nacions, la biografía de uno de los primeros responsables de protocolo de las instituciones catalanas, fundador de Esquerra Republicana de Catalunya y empresario de fama internacional en el exilio mexicano. El texto es el resultado de una investigación posdoctoral llevada a cabo por el profesor Lluís Burillo Toledano, tutor de trabajos finales del máster universitario de Comunicación Corporativa, Protocolo y Eventos de la UOC.
El Protocolo Oficial del Estado, en cualquier país, se basa en dos fundamentos esenciales: la normativa legal vigente, ya sea de carácter nacional, autonómico o local, y las costumbres y tradiciones inveteradas. La principal normativa de protocolo existente en España es el Real Decreto 2099/1983, de 4 de agosto, por el que se aprueba el Ordenamiento General de Precedencias en el Estado. Este texto legislativo establece el régimen de precedencias de los cargos y entes públicos en los actos oficiales.
El 24 de mayo de 2021 tuvo lugar el acto de toma de posesión del 132 presidente de la Generalitat de Catalunya, Pere Aragonès. Esta ceremonia, ya de por sí cargada de significado, revestía de un especial interés al producirse en un contexto de COVID-19 y también de fuerte convulsión política con representantes catalanes presos. Los organizadores y las organizadoras tuvieron en cuenta todos estos elementos en un acto protocolario al que se quiso dotar de un carácter sencillo, pero a la vez altamente simbólico por el momento historicopolítico en el que se produjo.
Egipto asombra al mundo con su desfile dorado de los faraones, un evento espectacular en el que las momias de veintidós reyes y reinas de la antigüedad recorrieron el trayecto que les llevaría hasta su nuevo y definitivo emplazamiento: el Museo Nacional de la Civilización Egipcia. Una puesta en escena basada en técnicas de storytelling reviste un acto cuyo objetivo principal es la promoción turística internacional y la revitalización de la marca país, tras un duro año de pandemia que ha mermado la actividad del sector.
El 25 de marzo arrancó el recorrido de la antorcha olímpica, que acabará encendiendo el pebetero del estadio de Tokio para inaugurar los Juegos Olímpicos de 2021. Con el lema «La esperanza ilumina nuestro camino», el relevo de la antorcha, igual que la planificación de los actos inaugurales y su protocolo, se está adaptando a las nuevas medidas para prevenir la COVID-19. Este año, estos actos tendrán más significado que nunca al transmitir el mensaje de los Juegos: la unión de la humanidad y el poder del deporte para cambiar el mundo.