
Las personas con autismo tienen competencias muy valiosas para el sector de la comunicación (y muy probablemente para la mayoría de sectores profesionales), pero todavía topan con un entorno que no sabe apreciarlas. Hacerlo más inclusivo es una cuestión de justicia... y de inteligencia colectiva.

Durante quince años, entre septiembre de 2009 y julio de 2025, el grado de Información y Documentación de la UOC ha formado a generaciones de profesionales que han entendido el grado no solo como el único que les era posible cursar, sino también como el que les convenía en aquel momento vital. Y no como un recurso neutro, sino que me atrevería a decir que como unos fundamentos suficientemente sólidos como para sostener las instituciones y la ciudadanía.

¿Por qué, si todos decimos que la publicidad tiene que ser creativa, a menudo las campañas terminan siendo tan parecidas? Esta es una de las paradojas que hemos estudiado en el marco de un doctorado industrial que lleva por título «Neuroadvertising / Improving the Creativity and Well–Being of Advertising Professionals in the Age of Generative AI». El estudio, basado en 350 profesionales de publicidad y marketing en España y 10 entrevistas en profundidad, concluye que la creatividad (esta palabra tan celebrada) es, demasiado a menudo, la gran perjudicada dentro de un sector que la pone en el centro del discurso, pero no siempre de la práctica.

En las últimas décadas, el tratamiento de lo monstruoso se ha desplazado: del enemigo a derrotar al compañero con quien se convive. En obras populares como Pokémon, How to Train Your Dragon y The Last Guardian, el vínculo con criaturas no humanas se sostiene menos en la fuerza y más en prácticas de atención, de cultivo de la confianza y de aprendizaje mutuo. Leído desde la ética del cuidado y los estudios multiespecie, este giro no es menor.

Fredric Jameson ya señalaba en Postmodernism, or, The Cultural Logic of Late Capitalism (1991) que la nostalgia constituye una sintomatología central de la condición posmoderna, caracterizada por el pastiche y la crisis de la historicidad. La nostalgia se ha convertido hoy en una de las lógicas culturales y estéticas dominantes más visibles en la producción audiovisual contemporánea, particularmente en el ecosistema de las series televisivas.

El fallecimiento de Peter Watkins el pasado noviembre devuelve la atención a una obra que cuestionó la pasividad y la homogeneización del lenguaje audiovisual. Sus películas, concebidas como espacios de debate y trabajo colectivo, dialogan hoy con un ecosistema dominado por plataformas y algoritmos. Revisarlas permite imaginar otras formas de producir sentido en común. En tiempos en que las imágenes se aceleran y los lenguajes audiovisuales tienden a la homogeneización, volver a Peter Watkins no es un gesto nostálgico, sino una necesidad crítica.

Los integrantes del proyecto de investigación «Ecologías de aprendizaje en salud mental digital en adolescentes de Barcelona. Contenidos y formatos de comunicación a través de redes sociales» (eHealthLit4Teen) fuimos invitados a participar en el debate abierto que tuvo lugar durante la última sesión del ciclo sobre «Bienestar digital y menores» organizado por The Conversation. El acto se celebró en el Palau Macaya de Barcelona el pasado 11 de noviembre.

La fachada de un negocio, y más concretamente, los elementos gráficos y de rotulación exterior de una tienda o de un restaurante, operan, más allá de su función comercial, como un indicador de las tensiones sociales y económicas presentes en los barrios. Con esta premisa y en el marco de la Barcelona Design Week 2025, en la jornada ¿El diseño gentrifica? planteamos el ensayo visual «Safari visual: la gentrificación en la rotulación exterior».

El tercer Seminario de Estudios Culturales, celebrado los días 13 y 14 de este mes de noviembre en el edificio Can Jaumandreu del campus de la UOC, consolidó un espacio de reflexión colectiva en torno a la pregunta que atraviesa, como un eco persistente, toda la historia de los estudios culturales: ¿qué entendemos hoy por cultura y qué fronteras la separan (o la confunden) con aquello que llamamos barbarie?

Los datos son una pieza clave en los trabajos finales y las investigaciones académicas. En función de las hipótesis y objetivos planteados en la investigación, los datos deben recopilarse o pueden reutilizarse si previamente ya han sido obtenidos y están abiertos. Hoy os presentamos un tesoro de conocimiento: los Barómetros y los estudios del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que recogen la opinión de la sociedad española en política, economía y otros muchos temas desde 1963.