El acto de tejer trasciende a todas las generaciones y a lugares diversos. Tejer conecta hilos, nodos, situaciones, localidades y fortalece los vínculos sociales. Esto lo saben bien desde los científicos hasta las comunidades de barrio.
Tim Berners-Lee en 1999 escribió el libro Tejiendo la red (Weaving the Web: The Original Design and Ultimate Destiny of the World Wide Web by Its Inventor) y ahí desarrolla su experiencia en la construcción de internet. Lo que plantea el autor es un sueño que cristalizó y que gradualmente se ha ido desvaneciendo; que internet sea un lugar común al alcance de todo el mundo. ¿Qué es lo que ha cambiado en la idea original de Berners-Lee?
Podemos explicar la situación actual de internet como una infraestructura de privilegios que genera brechas cada vez más grandes para muchas personas. Los poderosos ganan la partida y se margina del sistema a parte de la población. Por desgracia, esto nos suena familiar en diversas esferas de la vida cotidiana, como cuando hablamos de vivienda, alimentación y sanidad. ¿Qué tiene de relevante internet si no es una necesidad primaria? La respuesta a esta pregunta ha mutado gradualmente. En el año 2000, posiblemente internet no generaba tantas dependencias sociales y materiales como en el 2023. En la actualidad, internet y sus diversos servicios han creado una metástasis económica, de conocimiento, de vigilancia y de identidades que dificulta llevar a cabo acciones cotidianas sin estar conectado. Nos guste o no esta situación, la realidad es que internet se ha convertido en una necesidad primaria artificial. Solo debemos pensar en los procesos burocráticos para aspirar a la atención médica o a la educación para entender el impacto de estar conectado o no.
Por estas razones nacen proyectos que regresan a la idea básica de internet y que buscan conectar al mayor número de personas frágiles en relación con las tecnologías digitales. No solo hablamos de conectividad, también de capacidades para lidiar con la gestión de procesos administrativos, para escolarizarse, incluso para contar con equipo de trabajo como ordenadores y dispositivos móviles. El piloto XO9B (Xarxa Oberta de Nou Barris) es una extensión de XOB de Sagrera, Congrés-Indians que se fundó en el 2020. Su objetivo principal es conectar a personas a internet con una idea comunitaria: conectar a las personas para luego ayudarnos entre todas a sostener la red. Este despliegue cuenta con el apoyo de la asociación sin ánimo de lucro eXO.cat (Associació Expansió de la Xarxa Oberta), con base en Barcelona, que desarrolla proyectos de construcción de infraestructuras comunitarias de internet bajo los conceptos fundacionales de guifi.net, la red de telecomunicaciones autogestionada más grande del mundo.
Personas conectadas que, entre todas, sostienen la red
Fuente: https://comunalitats.cat/
La construcción comunitaria de internet no es diferente a los procesos comunitarios vinculados a la agricultura, las luchas por la vivienda o la organización vecinal. Comparte los mismos principios y defiende los mismos derechos, que cada vez son más diezmados por el necrocapitalismo actual. La idea es tejer y tejer relaciones y nodos de necesidades diversas para buscar soluciones comunes, descentralizadas y locales, para afrontar las problemáticas que nos estallan en la cabeza cada día. A esto se le ha llamado la «economía de los bienes comunes» desde algunos espacios académicos, o «sistemas cooperativos de resistencia», desde otros.
Tejer en Nou Barris
Compartir objetivos comunes con otras luchas encuentra sentido cuando proyectos como XO9B se inscriben en Comunalitats Urbanes, «un programa del Departamento de Empresa y Trabajo que quiere impulsar una organización más justa de la economía. En la actualidad, cuenta con veintidós comunalidades repartidas por todo el territorio, formadas per empresas, entidades, cooperativas y todo tipo de redes vecinales y de soporte mutuo». Este proyecto apoya con recursos y logística a veintidós comunalidades en territorio catalán.
Una de estas comunalidades está en el distrito de Nou Barris y relaciona entidades de:
- Soberanía alimentaria (redes de soporte mutuo y alimentación)
- Comercio de proximidad y movilidad (servicios ecologísticos de distribución)
- Cuidados (redes de soporte mutuo en las comunidades de vecinos)
- Soberanía energética (comunidades energéticas fotovoltaicas)
- Telecomunicaciones (red comunitaria de servicios de telecomunicaciones)
«Nou Barris es un distrito situado en el extremo norte de la ciudad, entre la sierra de Collserola y el distrito de Sant Andreu. Limita al sur con Horta-Guinardó, y al oeste con la sierra de Collserola. En total, el distrito tiene más de 800 hectáreas y está habitado por unas 168.000 personas de procedencias muy diversas». Esta descripción proviene de la web oficial del Ayuntamiento de Barcelona, pero lo que no dice la web es que Nou Barris es una de las zonas con los índices más altos de vulnerabilidad social de la ciudad.
¿Cuál es el potencial de juntar estos proyectos comunitarios?
Como argumentamos anteriormente, la conectividad a internet y las capacidades digitales cruzan diametralmente todas estas actividades de la esfera social. De hecho, pueden ayudar a mejorar sus procesos y sistemas comunicativos. De igual forma, proyectos como XO9B pueden aprender de metodologías propias de los proyectos de la comunalidad de Nou Barris con experiencia dilatada, como la Fundació Pare Manel (FPM), el Institut de Govern i Polítiques Públiques (IGOP), Azimut 360 Energia Solar Cooperativa, Ètic Hàbitat o el NOVACT - Institut Internacional per l’Acció No Violenta, así como con entidades participantes del territorio, como la Associació de Veïnes i Veïns de Verdum, la Plataforma d’entitats de Roquetes, la Associació de Venedors del Mercat de Nostra Senyora de Montserrat, el Ajuntament de Barcelona - Comissionat d’Economia Social, Desenvolupament Local i Política Alimentària y Barcelona Activa S. A.
Juntando las experiencias de estos actores, la red que se tejerá deberá ser robusta y consolidar procesos que ya suceden en el territorio de Nou Barris. La idea principal es reforzar la cultura de la cooperación e imaginar sistemas de sostenibilidad diversos para enfrentar los retos de futuro. Internet nos conecta entre nodos y ayuda a reforzar las luchas en común, siempre y cuando la construcción de esta red ayude a juntar a las personas, y no a separarlas. Por ello es fundamental que XO9B sea un piloto que ponga sobre la mesa los valores de cooperación frente a la competencia típica de los anchos de banda –al más puro estilo tecnoconservador– que predomina en la sociedad actual. Internet debe ser un bien común y no una matriz extractivista de la sociedad.
Citación recomendada
FOGLIA, Efraín. «Tejiendo comunalidades en Nou Barris». COMeIN [en línia], febrero 2023, no. 129. ISSN: 1696-3296. DOI: https://doi.org/10.7238/c.n129.2314
Profesor de Diseño en la UOC
@EfrainFoglia