Un desfile consiste en algo tan prosaico como “marchar en fila”. Sin embargo, también es un evento comunicativo de primerísimo nivel, particularmente para muchas firmas del sector moda. Así lo evidencia la , celebrada la semana pasada en Barcelona y consolidada como el desfile de moda con mayor proyección internacional de España. Pasarela Gaudí Novias
“Tengo 44 años. Soy un gallego que trabaja en Madrid. Aunque no soy nacionalista, mi nombre es Xurxo, no Jorge. Estudié Periodismo en la Complutense, por aquel entonces masificada y cosmopolita". Así se autodefine Xurxo Torres, director general de la consultora de relaciones públicas Torres y Carrera. Ésta es la primera entrega de la entrevista que le ha realizado Elisenda Estanyol.
Últimamente –quizá debido al contexto económico actual– existe un interés manifiesto por la función de inteligencia competitiva (IC), territorial, tecnológica, estratégica, o como queramos llamarla. Organizaciones de distinta naturaleza (entidades privadas y públicas, cámaras de comercio, ayuntamientos…) manifiestan, lógicamente, una inevitable preocupación por conseguir ser más competitivas en un entorno donde los constantes cambios y una cierta incertidumbre parecen ser la tónica dominante. Sería ingenuo pensar que desear ser competitivo es un propósito nuevo. Pero quizá sí que lo es la forma en que las organizaciones se están acercando a dicha competitividad.
En el marco del posgrado en Distribución Audiovisual: VoD y Nuevos Modelos de Negocio que la UOC ha puesto en marcha conjuntamente con filmin este curso 2012-13, la profesora Judith Clares, su directora académica, ha entrevistado a los representantes de distintas empresas del sector del Video on Demand (VoD). Ésta es la primera entrega de la entrevista a Jean-Yves Bloch, director general y chief executive officer del portal francés UniversCiné.
El estudio de las industrias del entretenimiento y su producción no puede estar desligado de cierto acercamiento a las circunstancias sociales, culturales y económicas que las rodean. Los recursos que hacen circular las industrias para el entretenimiento popular influyen y se reflejan en factores económicos y socio-políticos, en tendencias sociales y en corrientes subterráneas de la cultura.
Tiempos convulsos e inconsistentes estos. Tiempos en los que el mismo gobierno que recorta servicios sociales a la velocidad de la luz, el Gobierno catalán, se preocupa de extender una red de embajadores por el mundo. Tiempos también en que los embajadores españoles no sólo no se plantean darle escaparate a Cataluña en su portafolio, sino que bajo la coartada de la “marca España” piden a los españoles que no se manifiesten por la calle ‒que eso da mala imagen del país‒ y que, menos aún, hagan escrache. Está claro que se necesitan embajadores, pero no para pastelear la realidad, sino para proyectar la mejor imagen en las mentes de las personas. En España y también, y sobre todo, en Cataluña.
En septiembre de 2009 me citaba en una céntrica cervecería de Madrid con Bruno, Carola y Nico, tres jóvenes creadores que meses atrás habían decidido emprender una auténtica locura según todos los estándares: producir un largometraje de ciencia-ficción con vocación internacional y licenciado a través de Creative Commons, de forma que sus seguidores pudieran verla e incluso remezclarla como quisieran. Este mes de mayo, cuatro años después, El Cosmonauta se estrena mundialmente.
Las empresas quieren relacionarse con sus públicos. Esto no es algo nuevo: es la esencia de las relaciones públicas. La novedad radica en el entorno digital. Los medios sociales se convierten en los grandes aliados de los profesionales de la comunicación: los blogs permiten interactuar con los clientes y conocer su opinión; las redes sociales son las nuevas portadoras de exclusivas. Sin duda, Internet nos abre una ventana de posibilidades. En este artículo descubrimos qué hay de nuevo (y qué se mantiene) en las relaciones públicas 2.0.
Los bloggers están de moda. Estos nuevos profesionales han desafiado los gigantes grupos mediáticos para hacer oír su voz. Como si fueran pequeños artesanos han ido tejiendo su discurso ‒lleno de historias curiosas, novedades, mucho criterio y disciplina‒ hasta hacerlo llegar a un mundo globalizado.
La información y conceptos relacionados no se encuentran suficientemente incorporados en la teoría ni, todavía menos, en la práctica económica. Esto comporta dificultades para comprender la economía real, tal y cómo se desarrolla actualmente, en entornos altamente intensivos en información digital.